Amanece un nuevo día, y tocaba visitar Kobe, lo único que mi marido me reconoce que no le apetece nada de nada ir a Kobe, a mi ni me apetecía en exceso (era un día prescindible) así que ante la amenaza de que al día siguiente hubiera un motín a bordo y no fuéramos a Hirosima y Miyajima, decidí sacrificar Kobe y pasar el día en Kyoto.
Kyoto es una de las ciudades que más me gusta del mundo, no solo es preciosa sino que tiene de todo un poco. Como realmente Kyoto ya lo conocíamos nos dedicamos el día a pasear por la ciudad y ya de paso fuimos a comer a un restaurante que nos gusta mucho a los dos y que hoy, cinco años después de nuestra ultima visita sigue abierto)
De ese día no hay fotos, no fuimos de turismo, sino que fuimos de paseo, pero la verdad, fue un gran día.
Este es el ultimo post que escribo desde Japón, ya estamos en el aeropuerto esperando el avión. Así que deseadnos buen viaje
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