Museo Edo Tokyo y combate de Sumo

El fin de viaje estaba ya a la vuelta de la esquina :-( Nuestro penúltimo día completo por Tokyo había llegado. Ese día fuimos a un combate de sumo y aprovechando visitamos el museo Edo Tokyo ya que estaba al lado.
Nada mas levantarnos y desayunar nos fuimos para allá, además como no cogíamos el tren en Akihabara no nos entretuvimos viendo las tiendas XD.
Cogimos el tren hasta la estación de Ryogoku, donde se encuentra el Ryogoku Kokugican (donde se celebran los torneos de sumo) y el museo Edo Tokyo.
Según llegamos a la estación, ya nos dimos cuenta de que íbamos bien, había sumo por todos los sitios.
Un ejemplo:

Nada mas salir de la estación nos encontramos con esto xd

Por la zona había gente pero no mucha, la verdad es que esperaba mas ambiente, pero claro, aun era pronto.

Nos dirigimos al museo y allí pasamos la mañana, no es un gran museo, pero estaba entretenido. Sobre todo cuando podías hacerte fotos en los sitios XD
Como son muchas fotos las que quiero poner, os pongo un slideshow y así podéis ver las que queráis XD

...

Después de ver el museo entramos a ver el sumo.
Nada mas llegar encontramos a unos luchadores de sumo. Todo el mundo les hacia fotos, así que nosotros no fuimos menos.

Tras varias vueltas y pedir ayuda llegamos a nuestros asientos, estábamos bastante arriba, pero aún así lo vimos bastante bien.
Aquí podéis ver un vídeo, perdón por la calidad.

Al principio cuando llegamos estaba medio vacio, yo me quedé sorprendida y pensé que el sumo atraía mas gente, pero es que no contaba yo con que aún era pronto

Según fue pasando la tarde se fue llenado poco a poco hasta acabar así de lleno

Fue muy curioso y nos gustó mucho, la pena es que fuimos pronto y cuando llegaron los combates mas interesantes ya nos salía el sumo por las orejas, así que nos fuimos antes de que acabaran los combates, pero aún así vimos bastantes combates y bastante de toda la tradición que lleva.

Os dejo unas fotos:

Como podéis ver, realmente estábamos bien arriba, pero aún así lo vimos todo bastante bien y la acústica era muy buena, se escuchaba todo perfectamente.

Antes de irnos pasamos por una maquina de purikura, que es como una especie de foto-matón donde te haces un par de fotos con los fondos que quieras y luego las decoras a tu gusto, por Madrid he visto un par de maquinas parecidas, pero nada que ver con las que encuentras por Japón. 

Aquí podéis ver un ejemplo y además podéis ver que la máquina estaba en español (cosa,que por cierto, no recordaba jajaja)

Después de eso nos volvimos a la zona de Akihabara, donde dimos una vuelta (por no variar), cenamos y nos fuimos a dormir, no sin antes pensar que aún no nos habíamos ido y ya nos gustaría volver. 

Es curiosa la sensación que nos produce Japón, estamos lejos, muy lejos de casa, solo nos conocemos el uno al otro (aun que yo voy conociendo ya gente de allí)y aún así no sientes esa sensación de estar fuera de casa, no se como explicarlo, y si le preguntáramos a mi marido tampoco sabría, pero se que a el le pasa mas que a mi.

El caso es que el viaje ya estaba terminando, solo nos quedaban un par de días por allí, pero los íbamos a disfrutar, por supuesto.